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Luis Zamora Calzada

Por Aplicar La Ley, La Renunciaron

“¿Y usted cómo se llama?, no recuerdo su nombre Presidenta o mejor dicho no sé…”, se asegura preguntó con aire de gran señor y una manifiesta actitud de prepotencia y menosprecio Francisco Osorno Soberón, actual secretario del Trabajo del gobierno por concluir en el Estado de México, de quien se dice es ingeniero civil por la Ibero, ex presidente municipal de Chalco (2013-2015), ex diputado local (2009-2012), quien fungió como director general de la Protectora de Bosques (Probosque) hasta el viernes 10 de febrero del presente año y a partir del 13 del mismo mes, es titular de la dependencia en sustitución de Alejandra del Moral Vela; por cierto quinto personaje en ocupar el sexto piso de esa dependencia, quizá por ello no se sabe los nombres de los colaboradores.

Enfrente del “…hombre serio, experimentado y probo” como lo definió Eruviel Ávila Villegas ante integrantes de su gabinete en febrero pasado, tenía enfrente a Evangelina Lara Alcántara, profesora de carrera y hasta el martes 4 de julio Presidenta del Tribunal Estatal de Conciliación y Arbitraje del Estado de México (TECA), quien con calma minimizó al funcionario y se dice, se limitó a decirle: “Sólo llámeme ¡Señora Presidenta!, no es necesario ni interesa que usted se sepa mi nombre…”.

El ríspido encuentro fue días antes de dejar el TECA, fecha en que Francisco le requirió su renuncia a la maestra, manifestando que acataba las instrucciones de sus superiores, que acorde al organigrama estatal es viable deducir que la instrucción salió de la Secretaría General de Gobierno estatal en funciones.

La salida de la maestra se da en un entorno político en donde la corrupción y la impunidad se han convertido en los grandes males inherentes a bastantes políticos y funcionarios, provocando “el mal humor” de los mexiquenses y los mexicanos; el no acatamiento y violación a la ley por los titulares de las instancias gubernativas ha llevado al descredito a esa llamada clase política, con actuaciones cada vez más cuestionables y por la acumulación de riquezas personales, que resultan insultantes para los ciudadano que luchan cada día por subsistir.

En este contexto la presidenta del TECA (instancia impartidora de justicia laboral), venciendo inercias internas y externas, en su pretensión por cumplir con lo que le establecía la Ley del Trabajo de los Servidores Públicos del Estado y Municipios, aplicó las medidas de apremio ─sanciones a las autoridades que se niegan a reinstalar o pagar a los trabajadores despedidos sin razón legal alguna─, ordenadas en la ley laboral local para el cumplimiento de los laudos ─sentencias laborales a favor del trabajador─, dictados en los expedientes laborales resueltos en el tribunal, como consta en expedientes diversos y a manera de ejemplo las sanciones económicas impuestas a la ex titular de la secretaría de Educación Ana Lilia Herrera, quien regresó a sus funciones legislativas.

Todo parecía encaminado a una probable transformación lógica jurídica en la ejecución de laudos, hasta que la Presidenta saliente firmó en su carácter de titular del Tribunal Estatal de Conciliación y Arbitraje una suspensión temporal para el presidente municipal de Ecatepec, Indalecio Ríos Velázquez, por no cumplir de manera reiterada un laudo dictado a favor de una trabajadora del municipio, instaurada desde 2008 en contra del Ayuntamiento que gobernó el actual gobernador saliente.

Lo anterior consta en el expediente número SAE/385/2008 en cumplimiento del mandato de un Tribunal Colegiado en Materia del Trabajo, dependiente de la Suprema Corte de Justicia de la Nación; de no haber acatado la Presidenta del TECA la sentencia federal, hubiera sido separada y sentenciada por desacato a una determinación judicial dictada por los magistrados federales, con todas las consecuencias que establece la Ley de Amparo para las autoridades o los patrones que no cumplen con las sentencias que se ejecutan.

 

La maestra Evangelina ha sido separada por cumplir la ley, lo que parece estar muy lejos de la comprensión de quien ordenó su separación, a su vez la determinación de los hombres del sistema, parecen mandar un claro mensaje de la administración de Eruviel Ávila que por fortuna termina: adelante con no acatar la legalidad, seguir con la corrupción, la impunidad y que prevalezca la injusticia en contra de los trabajadores, pobre Estado de México en los dos meses que restan a este llamado gobierno constitucional.

 

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