Mosaico Mexiquense

Nuestra querida Tlalnepantla, sigue rebasada por líderes de comerciantes que les están dando un verdadero dolor de cabeza al gobierno municipal y a su presidente Raciel Pérez Cruz.

Vimos semanas atrás un despliegue policíaco entre varias corporaciones a los alrededores del Mercado Filiberto Gómez, en donde no se les permitía invadir banquetas y carriles de circulación, incluso las amas de casa y gente que venía a hacer sus compras dejaron de adquirir productos.

Posteriormente y luego de dialogar con los comerciantes, volvieron sábados y domingos a instalarse sobre la calle Emilio Cárdenas, incluso redujeron sus espacios y todo volvió a la normalidad.

Ya pasaron un par de semanas y que creen, nuevamente comerciantes no cuentan con líderes, son independientes y han vuelto a tomar las calles, las banquetas, ya no hay presencia policíaca y quienes asisten al mercado vuelven a padecer por donde caminar tranquilamente.

Y la autoridad, y su presidente Raciel Pérez no han regresado a ver qué pasa con estos comerciantes y los establecidos al interior y fuera del mercado siguen inconformes ante la “paciencia” que el gobierno tiene y no pone orden.

Hasta cuándo se preguntan, será que la autoridad tome en serio este asunto y problemática que vivimos todos los días, en donde nuestras ventas han bajado cerca o más del 50 por ciento, por gente extraña que llega, se instala y se pone a vender sin que nadie le diga nada.

Ya no se ven los operativos del área de abasto y comercio, ya no hay presencia policíaca, todos hacen lo que quieren y piden se recorran las calles aledañas al mercado como son Emilio Cárdenas desde Toltecas y hasta Revolución, al igual que en la calle Allende desde Porfirio Díaz y hasta Toltecas, Zahuatlán, Cuitláhuac, desde Lerma a Morelos.

Incluso comentan que en la Colonia la Romana, los vecinos se han quejado insistentemente porque las camionetas que vendían verduras cerca del mercado, ahora ocupan las calles de la colonia ante la complacencia de la autoridad, nadie les dice nada, incluso comentan que quizá les dan su “entre para dejarlos trabajar”.

Ahí queda lo que sucede alrededor del Mercado Filiberto Gómez en Tlalnepantla, en espera de que el Presidente y los funcionarios correspondientes hagan algo al respecto.