Santiago Tianguistenco / Estado de México
A dos años que iniciara la administración 2013-2015 que encabeza el aún presidente municipal Jesús Arratia González, los números en las finanzas de la tesorería no cuadran, prevaleciendo un rezago en el pago a proveedores, así como a servidores públicos de las diferentes áreas.
Aún y cuando en los tres ámbitos gubernamentales se han visto afectados por esta crisis financiera, no ha sido motivo para no pagar o tener rezagos económicos a más de un año de haberse prestado el servicio.
La disminución en las participaciones ha afectado diferentes áreas y en consecuencia la prestación de servicios, donde gobiernos municipales como Tianguistenco lo han querido agarrar de bandera para no atender los compromisos contraídos con prestadores de servicios.
En este sentido, tanto el gobernador Eruviel Ávila Villegas como el entonces presidente del Partido Revolucionario Institucional -en el cual milita el edil- Raúl Domínguez Rex indicó que la disminución o falta monetaria, no debería ser excusa para no atender a la sociedad, por el contrario se tenía que ser ingenioso y mostrar innovación ante tal situación.
Acción esta que no ha podido llevar a cabo en los dos años de gobierno el tesorero municipal de esta demarcación al frente de Damián Alejandro Olivares Valencia, quien a 24 meses de estar al frente de dicha área pospone continuamente las fechas de pago, cuando los servicios solicitados se realizaron en una sola exhibición y en el tiempo estipulado.
Una clara ineficacia e ineficiencia es la que se palpa en un área tan importante como es la tesorería municipal, repercutiendo ésta en la imagen y trabajo que viene realizando el Alcalde por diferentes comunidades del municipio.
Pero no tan sólo proveedores se han quejado de la falta de pago, también servidores públicos de diferentes áreas que en algún momento de los 365 días con que consta el año han tenido que padecer la falta de recursos, al retrasarles su pago o tener que disminuir sus horas laborales; quejosos que han solicitado el anonimato para evitar rencillas o represión par parte del Tesorero a quien se ve le temen.
La pregunta obligada es, ¿qué van a hacer si tanto el alcalde Jesús Arratia como el tesorero Damián Olivares pretenden competir en las próximas elecciones intermedias por un puesto de elección popular, sin recursos económicos suficientes para solventar una campaña?
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