Temoaya / Estado de México
Han pasado 15 meses de que inició la administración 2019-2021 que encabeza la presidenta municipal Nelly Brígida Rivera Sánchez, la cual se ha caracterizado por la ineptitud, inexperiencia, falta de oficio político y conocimiento de las políticas públicas municipales; al grado que hasta desconoce a decir de ella el sueldo que devenga, así como los Directores de las diferentes áreas.
En un año y tres meses de gobierno sus acciones emprendidas van en contra de los principios por los que se rige el Movimiento de Regeneración Nacional (MORENA) que son no robar, no mentir y no traicionar; una de las instituciones por las que compitió en la pasada elección, pero cabe hacer mención que su candidatura fue propuesta del Partido del Trabajo (PT).
En este sentido es de subrayar que en redes sociales se le ha visto más en eventos político-partidistas o como invitada en otros municipios, que en el cargo que le confirió la población otomí del municipio de Temoya y que por mucho ha rebasado las acciones de su antecesor Apolinar Escobedo y sus 40 ladrones.
La falta de autoridad y liderazgo de Rivera Sánchez han provocado un “gobierno fallido” al que varios vecinos de las diferentes comunidades apostaban por un cambio real y de beneficio para el desarrollo social y comunitario, lo cual no se ha visto, argumentando la falta de presupuesto para atender las demandas más apremiantes de la sociedad, pero no se ve así reflejado en el sueldo que devengan sus funcionarios públicos.
La falta de conocimiento de la administración pública y traer personas de otras localidades que velan más por sus intereses personales que por los de la sociedad, no les ha permitido gestionar apoyos ante las diversas dependencias estatales ni federales en beneficio de la etnia otomí que está habida de un cambio social y lo cual se puede apreciar en las diferentes vías de comunicación que conectan comunidad por comunidad, las cuales se encuentran en pésimo estado y que si bien es cierto no es de su injerencia, como representante del Ayuntamiento tendría la obligación de realizar las gestiones pertinentes.
En el rubro de seguridad pública que es un mal que aqueja a los tres niveles de gobierno, Temoaya ha enfrentado el mayor número de crímenes, asaltos y secuestros como nunca antes lo habían vivido; hace un par de días a unas cuadras de la presidencia municipal se encontró a una persona del sexo masculino, la cual fue acribillada sin que hubiera detenidos, lo que habla de la nula estrategia y la falta de preparación de quienes dirigen esta área.
La falta de autoridad por parte de la Alcaldesa en estos tiempos donde se está pasando por una severa crisis por la pandemia del COVID-19 que se ha registrado a nivel mundial, nacional, estatal y municipal, se ve reflejada al hacer caso omiso a los protocolos de seguridad marcados por la federación y el estado, al no poder impedir que se sigan realizando eventos religiosos que congregan a un significativo número de personas poniendo en riesgo la vida de los pobladores del municipio; lo que da cuenta de un “gobierno fallido” que preside Nelly Brígida Rivera Sánchez.
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